El Congreso de Brasil aprobó nuevas normas fiscales el martes, poniendo fin a un límite de gasto gubernamental, una victoria para el presidente de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo gobierno busca financiar programas sociales ampliados y proyectos de infraestructura.
Lula, que regresó a su cargo presidencial en enero, necesitaba la aprobación del Congreso de un proyecto de ley que permitiera a su Gobierno cumplir sus promesas de ampliar los programas sociales e implementar un ambicioso plan de inversión en infraestructura a un costo de 1,7 billones de reales (340.000 millones de dólares).
La administración de Lula considera que es necesario que el gobierno pueda gastar más con miras a revigorizar el crecimiento en la economía más grande de América Latina, diciendo que el límite del gasto ha sido violado varias veces y ha sido desacreditado.
Las nuevas normas permiten que el gasto público aumente en un 70% de la tasa de aumento de los ingresos públicos, como una herramienta para reducir el déficit.
La economía de Brasil creció un 1,9% más fuerte de lo esperado en el primer trimestre, los primeros tres meses de Lola en el cargo.