La agencia de protección ambiental de Brasil, IBAMA, ha impuesto una multa de 365 millones de reales (aproximadamente 64 millones de dólares) a varios ganaderos y empresas de procesamiento de carne, incluida JBS SA, el mayor productor de carne del mundo. Esta acción tiene como objetivo operaciones involucradas en la cría o compra de ganado proveniente de áreas deforestadas ilegalmente en la selva amazónica.
La investigación de IBAMA descubrió 69 propiedades que habían vendido 18,000 cabezas de ganado criadas en tierras deforestadas, además de 23 empresas de procesamiento de carne que adquirieron estos animales en las regiones de Pará y Amazonas. Esta iniciativa de aplicación busca abordar la deforestación desenfrenada mediante un monitoreo estrecho de la cadena de suministro de ganado vinculada a actividades ilegales.
En respuesta, JBS ha negado cualquier irregularidad, afirmando que ninguna de sus compras se originó en las propiedades señaladas. La empresa destacó su compromiso con la sostenibilidad a través de un sistema de monitoreo geoespacial diseñado para prevenir la adquisición de ganado de fuentes ambientalmente comprometidas.
La crisis de deforestación en curso en la Amazonía, exacerbada por la ganadería extensiva y la expansión agrícola, ha llevado a actores importantes en el sector, incluida JBS, a comprometerse a erradicar la deforestación de sus cadenas de suministro para 2025. Este compromiso incluye medidas para garantizar el cumplimiento de los estándares ambientales y abordar la participación de proveedores indirectos en la deforestación ilegal.