Argentina celebra la elección presidencial el domingo 19 de noviembre, en la que el actual ministro de Economía, Sergio Massa, y el economista liberal de línea dura, Javier Mill, competirán por la presidencia, dos modelos económicos diferentes. Una de mis propuestas de nacimiento es el dólar de la economía.
El dólar de la economía y el cierre del banco central son planes que atraen la atención de Javier Milley, fundador del partido de extrema derecha La Libertad Avanza. Estas medidas prometen eliminar la inflación argentina, que supera el 140% anual.
Sin embargo, las discusiones sobre si el dólar es o no apropiado en un país en desarrollo como Argentina se reflejan en todo el mundo, donde los defensores lo ven como una opción para aliviar los problemas económicos, pero también críticos que afirman que los países salen perdiendo en ausencia de moneda nacional. soberanía.
En América Latina, sólo el Ecuador y El Salvador reemplazaron sus monedas nacionales por el dólar de los Estados Unidos. Panamá utiliza su moneda nacional, pero solo en pequeñas transacciones y utiliza el dólar para grandes movimientos económicos.
Según Jorge González Izquierdo, profesor de Economía de la Universidad del Pacífico (Lima, Perú), la transformación de una economía en un dólar requiere que «el Estado compre toda la moneda nacional en circulación y emita dólares». Si es así, «cualquier país debe poseer una columna vertebral muy grande de reservas internacionales», de lo contrario debe requerir que el Departamento de Estado de Estados Unidos proporcione liquidez perdida, «invierta capital del extranjero» o «emita bonos» y contraiga deuda.
Sobre la posibilidad de eliminar problemas importantes como la inflación, el profesor enfatizó que «la posesión del dólar no te libera de esas cosas» debido a la dependencia evolutiva de la moneda estadounidense que sufre los efectos de la inflación. y el desempleo.
