El Fondo Monetario Internacional ha reducido su predicción de crecimiento económico para Argentina, esperando que la segunda economía más grande del país experimente una caída por segundo año consecutivo. Esta revisión a la baja llega mientras el presidente Javier Milei aboga por un cambio sustancial en las políticas.
De acuerdo con las últimas estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), se espera que la economía de Argentina se contraiga un 2.8 por ciento este año debido a una alta inflación. Esto se suma a una disminución del 1.1 por ciento en 2023. El FMI había pronosticado anteriormente una tasa de crecimiento del 2.8 por ciento para Argentina en 2024.
Después de asumir el cargo en diciembre, Milei ha eliminado los subsidios gubernamentales y los controles de precios, implementado una devaluación del 54 por ciento en la moneda y presentado estrategias para mejorar la estabilidad financiera. Como resultado, el miércoles pasado, una gran cantidad de personas se congregaron en Buenos Aires en respuesta al llamado de los sindicatos a una huelga de 12 horas para protestar contra las medidas económicas de Milei.
Los esfuerzos del gobierno para reducir gastos son esenciales para controlar la inflación, que el FMI predice que disminuirá a aproximadamente 150 por ciento anual para diciembre.
El economista jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, afirmó durante una conferencia de prensa en Johannesburgo, Sudáfrica, que el ajuste fiscal que se está realizando es importante. Explicó que la principal causa de la inflación es el financiamiento monetario excesivo, por lo tanto es crucial que el gobierno consolide y estabilice sus cuentas.
No obstante, Milei está enfrentando dificultades para llevar a cabo su objetivo de eliminar el déficit primario del presupuesto este año. Para obtener la aprobación de su paquete de reformas clave en el Congreso, tuvo que abandonar numerosas acciones propuestas, como aumentar los impuestos a las exportaciones y privatizar la compañía petrolera YPF.
De acuerdo con una reciente encuesta llevada a cabo por el banco central de Argentina, los analistas predicen que la economía se reducirá en un 2.6 por ciento en 2024. A principios de noviembre, el Instituto de Finanzas Internacionales había anticipado una contracción del 1.3 por ciento para este año.
A medida que los precios relativos se reajusten y la inflación aumente en un futuro cercano, la decadencia económica de Argentina impactará negativamente el crecimiento de América Latina en 2024. Según los economistas del FMI, se espera que la región solo crezca un 1.9 por ciento, en comparación con el ritmo del 2.5 por ciento visto el año pasado. Sin embargo, Argentina podría experimentar un retorno al crecimiento en 2025, con el FMI proyectando una expansión del cinco por ciento.
El siguiente párrafo será parafraseado en idioma español por María Eloísa Capurro, Bloomberg.