El Canal de Panamá sufre una escasez de agua que amenaza el comercio mundial, y el Canal tiene la intención de restringir el tráfico de navegación durante un año. Desde el 30 de julio, la Autoridad del Canal ha reducido el número de embarcaciones que pueden cruzar diariamente a 32 de 40.
El Canal de Panamá pasa alrededor del seis por ciento del tráfico comercial mundial, lo que permite a los buques pasar del Atlántico al Pacífico sin eludir a América del Sur.
Dos lagos artificiales proporcionan al canal maníaco el agua necesaria para operar las puertas de control, pero su nivel se ha reducido significativamente por la sequía y El Niño.
John Davis, meteorólogo jefe de Everstream Analytics, dijo que las precipitaciones en Panamá durante la primavera y el verano habían sido las más bajas desde el cambio de siglo.
«Esto no significa que los niveles de agua dulce en los lagos disminuirán, pero no vemos ninguna mejora significativa que viene aquí como esperamos el próximo mes.»
A ambos lados de la arteria principal de carga, 126 buques de carga se amontonan en largas filas mientras esperan su función de tránsito, un hacinamiento de alrededor del 40 por ciento más de lo habitual.