La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) está tomando medidas estratégicas para atraer de nuevo a los buques de gas natural licuado (GNL) de Estados Unidos a su ruta, con el objetivo de aprovechar la creciente demanda en los mercados asiáticos. Esto sigue a una disminución reportada del 65% en los tránsitos de GNL a través del canal, ya que las exportaciones de EE.UU. se dirigieron a Europa tras la crisis de Ucrania, que alteró los flujos globales de gas. Factores como los retrasos significativos y los altos costos asociados a las operaciones del canal debido a una sequía persistente impulsaron a muchas embarcaciones a optar por rutas alternativas más largas alrededor de Sudamérica.
Históricamente, el Canal de Panamá ha proporcionado el camino más corto para los envíos de GNL de EE.UU. con destino a Asia, un mercado que ha experimentado un crecimiento rápido en países como Japón, China, Corea del Sur e India. Sin embargo, las restricciones de tránsito más estrictas debido a la sequía, combinadas con las altas tarifas, llevaron a los exportadores a reconsiderar sus rutas, evitando el canal a favor del Cabo de Hornos a pesar de la mayor duración del viaje. Ricaurte Vásquez, administrador del canal, confirmó esta disminución sustancial en el tráfico de GNL.
En respuesta, la ACP introdujo un nuevo sistema de reservas a largo plazo diseñado para ofrecer a los transportistas mayor fiabilidad. A partir de enero, este sistema permitirá a los operadores de GNL asegurar sus espacios de tránsito con hasta un año de antelación, aliviando las preocupaciones sobre la congestión en el canal. La subasta inicial de espacios, que recaudó 394 millones de dólares, destaca el interés de la industria en opciones de paso seguras. Además, se planean tiempos de espera más cortos y una mejor asignación de espacios, especialmente para los buques que llegan sin reservas.
A pesar de los desafíos recientes, expertos como Anatol Feygin, de Cheniere Energy, son optimistas sobre el papel del canal en el comercio de GNL hacia Asia. Feygin señaló que, aunque las tarifas de tránsito del canal son elevadas, una mayor disponibilidad de espacios y la reducción de los retrasos podrían hacer que la ruta sea económicamente viable a medida que crece la demanda asiática de GNL. La ACP también se está preparando para futuras expansiones de capacidad, anticipando la llegada de buques de GNL más grandes y nuevas unidades de almacenamiento, lo que fortalecerá aún más su competitividad.