Los economistas han esperado que la moneda de México continuará su racha de ganancias históricas, registrando un crecimiento un 12% durante la primera mitad del año en curso.
Estas expectativas se presentan despúes de que el dólar continuó su tendencia a la baja en México, cerrando el último día de la semana pasada cerca de su nivel más bajo este año, y despúes de noticias de desaceleración de la inflación que podría conducir a decisiones menos estrictas por parte de la Reserva Federal.
La tasa de cambio del peso alcanzó de 17.07 unidades frente al dólar de los Estados Unidos, alcanzando su máximo nivel de cinco años.
Los expertos atribuyeron el crecimiento récord de la moneda mexicana a una disminución el dólar estadounidense un 0.18%, según el índica de ponderación, en medio de publicación de los índices estadounidenses débiles de la economía y el crecimiento.
Según estas expectativas, el dólar está influenciado sin resolver sobre las decisiones de política monetaria de la Fed.