El ministro de finanzas de Brasil, Fernando Haddad, anunció que se han superado los obstáculos restantes en la elaboración de un paquete fiscal destinado a controlar el aumento del gasto obligatorio del país. Sin embargo, Haddad también reveló que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva ha solicitado incluir recortes adicionales en otro ministerio, lo que indica una ampliación en el alcance de las medidas propuestas.
El real brasileño ha sufrido una depreciación significativa frente al dólar estadounidense en las últimas semanas, a medida que aumentan las preocupaciones por el retraso del gobierno en abordar el incremento del gasto fiscal. Estos retrasos en detallar un plan para reducir el gasto han aumentado la inquietud en los mercados, y la moneda ahora se encuentra cerca de mínimos de varios años.
Durante una rueda de prensa en Brasilia, Haddad evitó dar un cronograma específico para la publicación del paquete. Sin embargo, indicó que los temas pendientes de la semana pasada se han resuelto, lo cual podría acelerar la iniciativa. Según Haddad, la nueva directiva del presidente Lula es incluir un ministerio no especificado en las medidas fiscales, con las discusiones relacionadas que se espera concluyan a mediados de semana.
En los últimos días, el presidente Lula y su jefe de gabinete se han reunido con líderes de más de diez ministerios, incluidos sectores clave como Salud, Educación y Pensiones, para afinar el paquete fiscal. Aunque el gobierno inicialmente tenía como objetivo presentar la propuesta después de las elecciones municipales de finales de octubre, no se ha hecho ningún compromiso formal sobre el momento de la publicación desde entonces.
En respuesta a la especulación de que el paquete fiscal podría haberse estancado, Haddad aclaró que este no es el caso, señalando que se realizaron ajustes para garantizar que las medidas sean «más comprensibles y aceptables» para todas las partes involucradas. El objetivo, según Haddad, es crear un consenso en torno al paquete, aumentando la probabilidad de una rápida aprobación legislativa.
Haddad también compartió que planea reunirse con el presidente Lula para discutir los próximos pasos para presentar el paquete al Congreso de Brasil. Expresó optimismo de que los órganos legislativos podrían ratificar las medidas antes de fin de año. Según Reuters, estas reformas fiscales son vistas como esenciales por los observadores del mercado, quienes las consideran una intervención necesaria para reducir el gasto público y estabilizar la economía brasileña.
