En un desarrollo que refleja las dinámicas financieras globales, el banco central de Brasil está a punto de elevar las tasas de interés, aunque de manera menos agresiva de lo que esperaban los mercados. Este cambio se produce en medio del ciclo de relajación de la Reserva Federal, que, según JPMorgan & Chase Co., crea un entorno favorable para los activos de riesgo.
Bloomberg informa que el banco central de Brasil implementará un aumento de 25 puntos básicos en los costos de los préstamos este miércoles, siguiendo el movimiento de la Reserva Federal para reducir las tasas. Cassiana Fernandez, jefa de investigación económica para América Latina en JPMorgan, anticipa que Brasil elevará su tasa Selic de referencia al 11,5% para enero. Este ajuste, destinado a abordar la inflación y reforzar la confianza de los inversores, se espera que sea seguido por recortes en las tasas a mediados de 2025.
Fernandez describe el escenario económico actual como un momento «Goldilocks» para los activos de riesgo, debido a condiciones financieras más acomodaticias en EE.UU. sin desencadenar una recesión. Este entorno, señala, proporcionará espacio para que los bancos centrales, incluido el de Brasil, moderen sus aumentos de tasas en comparación con las previsiones del mercado.
A pesar de la anticipación del mercado de una serie de aumentos que llevarían la tasa clave de Brasil cerca del 12,25% para marzo, los ajustes reales probablemente serán más moderados. El desempeño económico de Brasil ha superado las previsiones de crecimiento, con el gasto fiscal y el bajo desempleo contribuyendo a un crecimiento robusto. Sin embargo, esto ha generado preocupaciones sobre posibles presiones inflacionarias.
JPMorgan también destaca los recientes problemas de credibilidad que enfrenta el banco central de Brasil. Una votación polémica en mayo, en la que los designados por el presidente Luiz Inacio Lula da Silva favorecieron una reducción de tasas más agresiva, exacerbó las preocupaciones sobre la postura del banco respecto a la inflación. El gobernador Roberto Campos Neto ha adoptado un enfoque más cauteloso para contrarrestar estos temores.
Gabriel Galipolo, el próximo gobernador en espera de confirmación en el Senado el próximo mes, ha enfatizado su compromiso con el control de la inflación a pesar de las percepciones iniciales de que es un defensor de tasas más bajas. Su postura será crucial para dar forma a la futura política monetaria de Brasil.
En general, la cobertura de Bloomberg subraya un momento pivotal para la estrategia económica de Brasil, influenciada por factores tanto nacionales como internacionales.