La Cumbre Climática se acerca a la Copa 28, y las naciones del mundo se están preparando para evaluar y hacer más para reducir la temperatura de la Tierra.
México es uno de los países que «desea jugar un papel muy activo en Cobb 28», según su Canciller, Alicia Barsina Ibara, que representará a su país en la conferencia dentro de días en los EAU, según la plataforma energética especializada.
Aunque la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador ha avanzado poco en el logro de los objetivos climáticos especiales, no ha ocultado su afán por obtener fondos para el cambio climático representado en el Fondo de Pérdidas y Daños, que aún está en construcción, según un informe publicado por Argus Media.
México es el único Estado miembro del G-20 y de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que aún no ha fijado el objetivo de la neutralidad del carbono y no ha anunciado ningún compromiso climático en la Cumbre sobre el Clima.
México ocupa el puesto 11 entre los principales productores de petróleo del mundo, ocupa el puesto 15 entre los mayores emisores de gases de efecto invernadero del mundo, y se espera que las emisiones dañinas continúen aumentando allí hasta 2035.